He aquí que finalmente me han forzado a abrir los ojos, y me arrebataron la poca inocencia que me quedaba. Así es, he descubierto una verdad aterradora sobre mi… Soy culpable de toda la pobreza y marginación que existen en el mundo!!! Soy el anticristo!!!! Pero no sólo yo… Si tu tienes aparatitos tecnológicos, o trabajas en un área relacionada con la tecnología, también eres culpable, tanto como yo.
Jaaaaaaaaaaaaa!!!!! Cómo ven la pendejada que andan diciendo los Hijos de la ……. del Fondo Monetario Internacional???? Efectivamente! Según esa bola de cerdos que en su vida han salido de su palacio: “El progreso tecnológico explica por sí solo casi todo el incremento en la desigualdad desde 1980“. Neta, esa joyita se aventaron estos desgraciados en su última convención (aquí les dejo el enlace al documento PDF, si es que prefieren dudar de mi y verlo con sus propios ojos).
Vamos, que esto de robar y joder al pueblo y luego poner cara de pendejo y decir “Yooooo??? Robarte yoooo???? Imposible! Mentir, yo???? Cómo te voy a mentir? Yo tengo las manos limpias” no es exclusivo de nuestro país… Tal vez el FMI esté viniendo a tomar cursos, o tal vez nuestros políticos quieren tomar los métodos de tan loable y abnegada institución, que a lo largo de todos estos años no ha hecho más que aconsejar a los países del “tercer mundo” sobre la mejor manera de salir de la pobreza… Claro, pendejos tercermundistas, siempre la cagan, aunque hagan todo tal cual el FMI recomendó.
Señores del FMI… El mundo está hecho una mierda por USTEDES, capitalistas de porquería! El progreso tecnológico sólo se da en los países con dinero, es decir, ya desarrollados. En los países “no desarrollados” como tanto gustan en llamarlos, no tienen progreso tecnológico, porque siguen las pautas que USTEDES dictan (uhu, aconsejan la neta se lee demasiado falso), así que no vengan con (más) estupideces.
Por otro lado, nuestr@s polític@s siguen haciéndose pelotas (pendej@s) a la hora de explicarnos qué coño será exactamente el novísimo tarro de mierda, perdón, Iniciativa Mérida. Y claro, esperan (exigen!) que confiemos en ell@s, aunque no puedan explicar del todo tan complicadas e intrincadas profundidades de la política, porque ¡Vamos! Nunca nos han mentido ni defraudado antes (Será? Digo, igual y yo vivo en una realidad alternativa, y aquí si han cumplido con todo lo prometido, empezando con el trabajo para todos).
En resumen, además de jodidos y pobres, ahora nos quieren hacer pendejos.